La iniciativa, que se ubicará entre las comunas de Colina y Til-Til, forma parte del ambicioso plan de desarrollo renovable por más de 2.000MW que la compañía anunció recientemente.
ENGIE Energía Chile sigue avanzando en nuestra transformación energética, a través del desarrollo de proyectos renovables y dando pasos concretos hacia la carbono-neutralidad a nivel global. La semana pasada la compañía ingresó a evaluación ambiental el proyecto “Parque Fotovoltaico Libélula”, que tendrá una potencia de 199,2 MW y una capacidad de producción anual de 423 GWh.
La iniciativa contará con la instalación y operación de aproximadamente 321.360 paneles solares bifaciales, los que tendrán una potencia nominal mínima de 620 Wp en corriente continua. También se construirá una Subestación Elevadora dentro del área del parque fotovoltaico, y para la evacuación de la energía generada, se construirá una Línea de Transmisión de Alta Tensión (LAT 1×220 kV) de 16 kilómetros de longitud aproximadamente, la que se conectará a la ya existente Subestación El Manzano, para su conexión e inyección al Sistema Eléctrico Nacional (SEN).
El gerente general de ENGIE Energía Chile (EECL), Axel Levêque, afirmó: “Este paso implica seguir avanzando en nuestro proceso de transición energética, que considera un desafiante plan de rotación de activos, principalmente orientado al desarrollo de iniciativas solares y eólicas. En paralelo seguimos adelante con el cierre de nuestras unidades a carbón al 2024 y el desarrollo de 2.000MW de energías renovables”.
Plan de transformación
EECL anunció durante abril del 2021 un completo plan de transformación, que considera la salida total del carbón al año 2025 y un desafiante plan de desarrollo renovable en Chile por un total de 2.000 MW. Esto último considera la construcción de alrededor de 1.000 MW de proyectos eólicos y solares adicionales a los 1.000 MW ya comprometidos en la cartera anunciada en 2019. En la actualidad, la compañía está construyendo en el norte del país el Parque Eólico Calama, las plantas solares Capricornio (Antofagasta), Tamaya (Tocopilla) y Coya (María Elena) que en conjunto suman cerca de 560 MW.
El plan completo, que contempla una inversión superior a 1.500 millones de dólares al año 2025, significará una reducción de 80% de las emisiones de CO2 para 2026. Esto implicará una disminución del orden de 5 millones de toneladas de CO2 al año con respecto a las emisiones actuales, equivalente a sacar de circulación 1.6 millones de autos (cercano al 30% del parque automovilístico total de Chile).